Un paseo de fin de semana, caminar por la ciudad con ojos de turista. Caminar por Providencia, visitar el Parque de las Esculturas, pasar por el cerro San Cristóbal, tomar el funicular hasta la cima, captar Santiago desde lo alto. Aunque sea por un día, vivir la ciudad y empaparse de aquello que tenemos, mirándolo y sintiéndolo de cerca.